Oaxaca es el epicentro de la cultura gastronómica tradicional de México y la comida aquí es cualquier cosa menos simple. Hay lugares familiares de comida rápida como Wendy’s. Pero hay mucho mas. La comida está influenciada por las raíces indígenas de los grupos mixtecos y zapotecos. Desde puestos callejeros, restaurantes y mercados locales, encontrará que los alimentos de Oaxaca son ricos en historia.
Parte de su riqueza gastronómica proviene de los diversos microclimas de las 8 regiones del estado. Aquí encontrarás todo tipo de comidas y bebidas deliciosas, desde mezcal ahumado hasta tlayudas, chocolate, pan de yema y mucho más.
La cocina de Oaxaca está anclada en ingredientes tradicionales que son endémicos de la zona. El maíz, por ejemplo, predomina en sus platos. Oaxaca es la cuna del maíz y utilizan este ingrediente en comidas como tostadas, blandas y tlayudas. El chocolate se ha utilizado desde la época prehispánica. Los zapotecas la apodaron la “bebida de los dioses”. Actualmente el cacao se está utilizando en postres, bebidas y moles.
Estos son los mejores alimentos que debes probar cuando estés en Oaxaca:
1. Tlayudas de Oaxaca
Las tlayudas, a veces deletreadas “Clayudas”, son de las comidas callejeras más tradicionales e icónicas de Oaxaca. También conocida como pizza Oaxaca, consiste en una tortilla crocante plana y grande cubierta con frijoles negros refritos cocinados con manteca de cerdo sin refinar. Luego, el quesillo se coloca sobre los frijoles negros y luego se cubre con carne como cerdo, res, costilla de cerdo y salchicha mexicana.
2. Mole de Oaxaca
El mole es un alimento característico de Oaxaca, una salsa sabrosa y de varias capas que tiene muchos colores y sabores. Se dice que Oaxaca y Puebla son el lugar donde nació el mole, y los célebres moles de Oaxaca son el mole rojo, el mole negro, el mole coloradito, el mole verde, el mole amarillo, el mole manchamantel y el mole chichilo. Oaxaca tiene ocho regiones y los moles varían según el gusto personal del cocinero, los ingredientes y la ocasión. Pero el más famoso sería el mole negro que tiene más de 30 ingredientes, 6 tipos diferentes de chile y chocolate. Se sirve con pavo o pollo y arroz.
3. Chiles Rellenos
Los chiles son claramente uno de los pilares de la cocina mexicana, por lo que no sorprende que encuentre muchos tipos de pimientos rellenos en el país. En Oaxaca, sin embargo, los chiles se rellenan con pollo desmenuzado y una mezcla de ingredientes dulces y salados. Estos chiles rellenos se conocen como Chiles Rellenos de Picadillo. El pollo desmenuzado con cebollas, tomates, almendras, alcaparras, aceitunas, pasas y hierbas hacen de este plato algo que recordarás durante mucho tiempo.
4. Caldo de Piedra
El caldo de piedra es un plato prehispánico preparado solo por hombres en honor a las mujeres. Una vez que una especialidad del pueblo chinanteco, que vivía al norte de la ciudad de Oaxaca, este plato de sopa de piedra es una mezcla de chalotes, cilantro, cebollas, epazote, chile, pescado, camarones y agua y luego se cocina durante 3-4 minutos con piedras de río calientes. . Es una tradición cultural transmitida de generación en generación. Él
El Caldo de Piedra es símbolo de respeto, unidad y honor y siempre se cocina con el corazón.
5. Tamales Oaxaqueños
Los tamales de Oaxaca tienen un lugar especial en el corazón de todos los mexicanos. Su historia se remonta al año 7000 aC durante la civilización azteca, cuando los indígenas recolectaban el teocintle silvestre, de donde proviene el maíz moderno. El maíz era un alimento ritual esencial y Teocintle era su dios del maíz. La palabra tamal tiene su origen en el náhuatl y Tamalli significa envuelto. Los tamales se hacen con masa de maíz cocida al vapor y se envuelven en hojas de maíz, pero en Oaxaca se envuelven en hojas de plátano.
6. Memelas
Las memelas se suelen comer en el desayuno. Es una tortilla pequeña y gruesa con bordes pellizcados y cubierta con manteca de cerdo, seguida de una fina pasta de frijoles y cubierta con queso oaxaqueño quesillo o queso fresco. A veces puedes conseguir memelas cubiertas con pollo guisado, champiñones o chorizo.